L de Luna.

Maquillaje Pontus Veteris.

Te aseguro que yo también lloro, que no soy de piedra aunque me guste aparentarlo. Que uso productos todos los días para tapar las ojeras por no dormir al no poder conciliar el sueño, que aparento una sonrisa y los miedos me los guardo para mí. Quizás por eso dicen que las apariencias siempre engañan, porque todos ocultamos algo.
No me gusta estar lejos de la gente que me importa, si no que siempre estoy ahí, a pie de cañón por si pasa algo. Y tengo la certeza de que también están si yo les necesito.
Me voy, ¿lo sabías? Lejos. Y sí, tengo miedo. ¿A qué? A todo. Soy de esas que creen que para hacer algo y especialmente lo correcto, no puedes pensártelo dos veces, que cada uno mira lo que le beneficia a sí mismo y que a veces si piensas todo demasiado optas por lo fácil y la vida está llena de dificultades que hay que pasar. 
Me voy, ¿cuánto tiempo? Quizás demasiado. No me paré a pensarlo hasta hace unos días. 
Me voy, ¿con quién? Sola. Siempre me he considerado mayor, independiente, responsable y atrevida. Y ahora pienso, ¿y si me equivocaba? Pero no hay vuelta atrás.
Me voy, sí, pero, ¿sabes qué? Volveré.